Cuando nuestros pequeños inician su etapa escolar, es un periodo de cambios drásticos, ya que salen de casa, donde cuentan con un ambiente el cual les brinda protección, amor y sentido de pertenencia entre otros. Para ir a un lugar que no conocen, donde hay gente entre niños y maestros que también desconocen, así como reglas que seguir. Todo esto causa un conflicto en los pequeños, el cual superan con el paso de las primeras semanas, o meses dependiendo de cada niño.
Se pueden hacer varias acciones para tratar de que nuestro hijo se sienta lo mejor posible en este nuevo cambio.
En estos tiempos con toda la tecnología que tenemos a nuestra disposición, podemos ocuparla como herramienta que nos ayude a brindar seguridad en este proceso de separación.
Es importante que el niño ayude y participe es las actividades ya que tendrán más valor para él, que sí solo las recibe como un regalo más. Además de que con estas actividades estaremos desarrollando su creatividad, así como la toma de decisiones y diferentes habilidades como motricidad fina.
Ideas de cosas que se pueden hacer:
ü Se puede elaborar un pequeño álbum familiar para la mochila con las fotos de las personas importantes que rodean al niño, pueden ser fotos de papás, primos, hermanos, abuelos, mascotas, etc. A varios ½ de hoja carta de fomi se le pegan las fotos, se cubren con una mica para proteger y se le da el acabado de marco con el mismo fomi y a esto se les hacen unas perforaciones laterales para que con estambre y aguja de plástico chata el niño haga la costura.
ü Sí tenemos acceso a la computadora, a internet y a una impresora a color, podemos buscar imágenes de los dibujos animados que le gusten para hacer un collage e imprimirlo y con esto se puede forrar algún cuaderno.
ü Se le puede pedir a la abuelita o alguna persona especial que ayude al niño a elaborar un distintivo para la mochila en donde tenga el nombre del niño y el grado que cursa (como los que se usan para las maletas).
En donde el niño podrá pintarlo, decorarlo con diamantina, pegarle estampas, etc. y después plastificarlo para su protección y colocarlo en la mochila con un listón.
Con actividades sencillas como estas podemos ayudar a nuestros hijos a sentirse mejor, rodeado por cosas hechas especialmente para ellos, por la gente que ama y por ellos mismos, además de fomentar la creatividad para la realización de las mismas.
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